Desde que contactaron con nosotros para la eliminación de este pino que tanta incertidumbre estaba causando, hasta que lo vimos completa y definitivamente eliminado, nos causó gran problemática, tanto en la ejecución como en el desarrollo de los trabajos.

Dada la complejidad y dificultad del enclave de este tremendo ejemplar, tuvimos que adoptar medidas especiales de seguridad. Ayudados con sistemas complejos de poleas y cambios de direcciones en el descenso de ramas, nos armamos de paciencia y tesón para poder llevar a cabo tan difícil tarea, llevando el compromiso de seguridad por bandera y el de no deteriorar ningún elemento como principal tarea.

Tuvimos que valorar la caída natural que tenía sobre la muralla histórica y que el anclaje de raíces no era de los más fiables que hemos visto. A esto le sumamos distintos factores a tener en cuenta que hacían, si cabe, más especial el trabajo al ser un ejemplar ubicado en un lugar tan especial.

Este árbol ha visto crecer la ciudad de Segovia y cuando estamos ante ejemplares de tal importancia, valoramos muchísimo la manera de poder conservar estas joyas naturales que tanto extrañamos el día que nos faltan.